¿Y QUÉ PASÓ DESPUÉS?
Confiamos en que toda esta información quedará bien resguardada con ustedes, compartirla podría causar otra emergencia.
¿Les gustaría saber qué pasó después de su gran misión? Vean esto:
El mundo volvió a ser feliz y pleno. Toda la gente, sin saberlo, comenzó a sentir los beneficios del Alele. Muchas gracias, ustedes son los héroes.
General Mills pudo producir suficiente Alele para sus productos, suficiente cantidad para el mundo entero y por mucho tiempo.
El científico Peter Fegot esa noche salió de fiesta, la pasó muy bien y al día siguiente tuvo una pequeña jaqueca de tanta diversión.
La fórmula hoy está más segura que antes, alojada en varios servidores secretos, en un lugar secreto, cuidada por gente secreta, con mucho secreto.
